La acción de Esquina Peligrosa de John B.Priestley, se ubica en
Londres, Inglaterra en la década del 30, en la mansión de una familia
acaudalada, dueña de una importante empresa editorial. Originalmente su
fundador Mr. Whitehouse, quien ya ha fallecido y le sobreviven sus hijos Freda,
casada con Roberto Caplan y su hermano menor Brian, casado con la dicharachera
joven Betty. Esta noche los Caplan, agasajan a Miss Margaret Parsson, exitosa
novelista, y mujer de afilada lengua en los medios londinenses, que
publica sus obras en esta editorial. A la cena han sido invitados, Miss
Olivia Peel, quien es amiga de la familia, y empleada de la empresa, como así
también uno de los directores de la empresa, Mr. Charles Trevor Stanton.
Se inicia la obra, después de haber concluido la cena, con
los hombres en el piso de arriba bebiendo tragos, y las damas, escuchando
una novela por radio, el gran entretenimiento de esos años. Esta se
titula, “No abras esa puerta”. La misma ha despertado interés por el
desarrollo de su historia y su contenido. Concluye esta, con la supuesta
muerte del protagonista.
Reunidos todos posteriormente en una sala, continúa agasajando a
Miss Parsson, dentro de la cordialidad y recato que la sociedad alta londinense
acostumbra. En determinado momento del transcurrir de la reunión, Freda invita
con cigarrillos a los presentes y la novedosa cigarrera, que muestra, es
reconocida por Miss Olivia. Freda señala que es la primera vez que
la muestra en público. Cuando Miss Olivia asegura que se la mostró Martín
Caplan, el hermano muerto de Robert, ocurrido hace un año en misteriosas
circunstancias, desconcierta a todos.
Esta cigarrera, se constituirá en el punto de partida de la
historia compleja que vivirán estos personajes, y sobre todo, el
descubrimiento de aspectos desconocidos de ellos y entre ellos, y que los
hechos expuestos los lleva a adelante, sin retorno, hasta la finalización
de la obra.
El autor nos narra de una manera maravillosa esta historia de
suspenso, intrigas, falsedades, y sorpresivas confesiones, que obligan al
espectador a una concentración apasionante y a un desenlace aún muchos
más ambiguo y delirante.
QUE
PIENSA EL DIRECTOR DE “ESQUINA PELIGROSA”
Es evidente que cuando un director pone en escena una obra, esta lo ha motivado
fuertemente, le ha despertado su vuelo creativo, nace un deseo ferviente de
realizarla, lo que significa ponerle el cuerpo y el alma. Existen casos
contrarios, que se ponen obras sin estas
motivaciones, pero los resultados son otros, casi siempre no artísticos y son pérdidas
de tiempo para los que la realizan y para el público, además del gasto
innecesario de dinero. “Esquina peligrosa” es una pieza muy bien escrita,
concebida y con gran vuelo creativo. Además de ser un espejo de la realidad
inglesa de ese tiempo, con proyección a un futuro anunciado, enriquecida
en lo mejor de la comedia inglesa, que nos remite a Oscar Wilde, brillante,
agudo y profundo comediógrafo, y a Bernard Shaw, por mencionar solo a dos antecedentes virtuosos que nos desdeñaron
en agudizar e ironizar sus críticas feroces a su tiempo y a una clase alta, banal y soberbia.
Para este director, esto no ha sido más que una
provocante pieza, que me ha llevado a construir mi propia versión textual, que
no ha afectado su texto, solo que ha reducido su extensión que duraba 2 horas. Es conocido que nuestro público, al menos el de
la capital, que es el que conozco, no soportaría tal extensión. Eso lo señala
mi propia experiencia. He agregado dos
canciones que no alteran, ni su estructura, ni su contenido. Los textos de
estas, son los que el autor ha escrito.
También, evite conscientemente,
esos “caprichosos aggiornamientos”, que algunos directores en los últimos
tiempos, “abusan”, suponiendo esos creadores, que el público no comprenderían
el contenido de esas obras en su temporalidad original, en proyección al presente.
Eso, entiendo yo, es subestimar al espectador.
Desde
luego mi interpretación de la obra, no es intentar, modificar la original creación
autoral, ni en lo ideológico, ni en lo estilístico, como tampoco en su tiempo,
sino ser fiel a la misma, sin que por ello comporte, montar una pieza arqueológica
sin vida. Es mi
propia recreación, mi propia lectura de esa obra.
“Esquina
Peligrosa”, es de una enorme actualidad, tal como la concibió Priestley en su
época, y mi deseo, es rescatar su enorme teatralidad , desde la concepción del
tema elegido y sus personajes, que es teatro (radioteatro en la pieza) y sus
personajes que “actúan” las veinticuatro horas, con sus mentiras y sus dobles
roles, es acompañada por un escenografía que esta “pintada” como los personajes,
y aumenta la distancia con la obra, para que el espectador, no se deje
influir por sentimientos instantáneos y
deje operar su capacidad de análisis y reflexión. Esta es una comedia
inteligente, donde el autor ha dejado abierto el final al espectador para que
él, cierre esta historia, sutil, aguda, irónica, diría cruel, que desnuda a estas ocasionales criaturas, y por proyección, es
espejo para la variada platea.
Hugo Alvarez - Febrero/2014
Me emocioné al leer la síntesis de Esquina Peligrosa. En mi último año de secundaria, colegio Abraham Lincoln (escuela n° 28), nuestro profe de Derecho Usual, al cual le gustaba el rol de Director, formó un grupo del cual fui parte para llevar a cabo la obra.
ResponderEliminarMi personaje fue Freda (Olga), a cada personaje le cambio el nombre y la obra se desarrolló en la época actual año 1984. La expusimos en el colegio y en un club del Barrio Saavedra "Club Pinocho" y a pesar que no teníamos estudios de teatro fue un gran éxito.
Al año siguiente nos convocó para llevar la obra a Entre Ríos, pero las obligaciones laborales no me lo permitieron.
Fue una magnífica experiencia actoral, escenográfica y vestuarista, ya q todo fue entre todos 💞